Hace una semana, la comunidad de Gálvez, en el departamento santafesino de San Jerónimo, fue sacudida por un secuestro extorsivo que tuvo un final feliz. La víctima, un joven de 27 años con discapacidad, fue liberada sana y salva unas pocas horas después de ser capturada por dos delincuentes que lo maniataron y lo obligaron a subir a un vehículo.
Según los informes, el joven había salido de su trabajo en un bar local cerca de la medianoche y se dirigía a su casa en bicicleta cuando fue interceptado por los secuestradores. Lo redujeron, lo maniataron, lo cubrieron con una capucha y lo obligaron a subir a un Ford Focus gris.
La familia del joven no se dio cuenta de que había sido secuestrado hasta que uno de los delincuentes llamó a su madre pidiendo un rescate de 200 mil dólares a cambio de su liberación. La familia, que es propietaria de un comercio, alertó a la policía y se inició un operativo de rescate.
La intervención de la Policía Federal fue crucial en la resolución del caso. La delegación Santa Fe y el Departamento Antisecuestro de la Policía Federal de Buenos Aires trabajaron juntos para localizar a la víctima. Los teléfonos de la madre y del hijo fueron intervenidos y las escuchas permitieron a los investigadores seguir de cerca los movimientos de los delincuentes.
Finalmente, los secuestradores aceptaron un rescate de 5 millones de pesos y liberaron al joven en una zona rural de Ricardone. Un camionero que lo conocía casualmente lo encontró y dio la buena noticia a la policía.
Los investigadores continuaron trabajando para identificar a los responsables del secuestro. Al analizar el teléfono de la madre del joven, encontraron una llamada perdida que los llevó hasta los dos hermanos sospechosos que son vecinos de la misma localidad. Este viernes, la Policía Federal logró detener a los presuntos responsables del hecho.
Afortunadamente, la víctima pudo ser rescatada sana y salva y los responsables del secuestro fueron identificados y detenidos. Este es un recordatorio de la importancia de la rápida intervención policial en casos de secuestros extorsivos. La colaboración entre las distintas fuerzas de seguridad también fue esencial en la resolución del caso.