En año electoral, los equipos de campaña se rompen la cabeza pensando cómo conquistar el voto joven: los chicos del TikTok. Aquí, un apunte interesante.
El fenómeno de TikTok
A través del influyente informe Digital News Report, el Instituto Reuters y la Universidad de Oxford revelaron en 2022 que TikTok es actualmente la aplicación más descargada en el mundo desde el 2020. En Argentina, las cifras postpandemia son vertiginosas: creció un 43% desde 2022 y ya son 16 millones las personas que la utilizan. En Europa, Google entró en una fase alarmante al confirmar que los jóvenes de 18 a 24 años están sustituyéndolo por Douyin -así se la llama en China- como principal buscador de información en internet. Hasta acá, los datos duros, irrefutables.
¿Qué tienen en la cabeza los chicos y chicas de TikTok?
Ahora bien, parafraseando a la activista social y militante peronista Mayra Arena, cuyo título de charla TED fue ‘¿Qué tienen los pobres en la cabeza?’, resulta atrapante hacer una analogía para este ensayo académico: “¿Qué tienen en la cabeza los chicos y las chicas de TikTok?”.
La pregunta/problema no apunta a criticar las prácticas adolescentes de manera negativa sino a analizar y comprender aquello que se convirtió en un fenómeno y rápidamente pasó a ser una tendencia global instalada en los dispositivos móviles de miles de millones de personas.
TikTok y el consumo e identificación
Si hasta el momento la fugaz experiencia del goce y lo placentero en la sociedad de consumo del mundo capitalista era analizada por la adquisición de un bien material o servicio para satisfacerlo, se podría decir que TikTok está logrando destrabar e imponer con sus microvideos un nuevo nivel de consumo e identificación, que a su vez tiene que ver con un refuerzo de la cultura mediática que habitamos.
M es una adolescente de 15 años que vive en la periferia de Mar del Plata (Argentina), tiene un hermano mayor de 18 años y otro menor de 7. Actualmente (junio 2023), va a 4to. año del secundario en un colegio privado.
Ella define a la red social de videos cortos como “un vicio”. “Salgo y vuelvo a entrar porque me atrapa”. Al indagar sobre aquello que le resulta atrapante, la joven responde que más allá de la creación de contenidos a partir de plantillas ya creadas, como pueden ser audios de otros videos para hacer la mímica y subirlo a su perfil, ella mira casi sin parar “tutoriales de maquillajes”: cómo hacerse “mascarillas” y “cosas de skincare para la cara”. Consultada sobre si todo esto tiene algún objetivo en particular, ella piensa y responde: “No soy de salir. Me gusta estar producida. Es algo que me hace sentir bien”.
Esa conducta revela que para M, TikTok no solo es una plataforma de entretenimiento, sino también un espacio donde puede explorar y desarrollar su identidad, aprender nuevas habilidades y conectarse con otros usuarios que comparten sus intereses.
Otro aspecto interesante es la forma en que TikTok ha democratizado la creación de contenido. A diferencia de otras plataformas sociales donde la producción de videos requiere equipos sofisticados y conocimientos técnicos, en TikTok cualquier persona con un teléfono inteligente puede grabar y compartir sus videos. Esto ha permitido que los jóvenes encuentren una voz y una plataforma para expresarse creativamente, sin importar su origen socioeconómico o nivel de experiencia.
Además, TikTok se caracteriza por su algoritmo de recomendación personalizada, que muestra a los usuarios contenido adaptado a sus preferencias y comportamientos. Esto crea una experiencia altamente personalizada y adictiva, ya que cada vez que se desplazan por la aplicación, encuentran contenido relevante y atractivo. Para los jóvenes, esto significa que pueden pasar horas explorando videos que se ajustan a sus gustos, lo que refuerza su compromiso con la plataforma.
En el contexto electoral, los políticos y sus equipos de campaña han reconocido el poder de TikTok como una herramienta para llegar a los jóvenes votantes. Algunos candidatos han creado perfiles en la plataforma y han utilizado estrategias creativas para difundir su mensaje político de una manera accesible y entretenida. Los desafíos y tendencias virales relacionados con la política se han vuelto cada vez más comunes, lo que demuestra cómo los jóvenes están involucrados en el debate político a través de TikTok.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el acceso a TikTok no garantiza el compromiso político de los jóvenes. Si bien la plataforma puede ser una herramienta efectiva para captar su atención, los políticos también deben abordar los problemas que les preocupan y presentar propuestas concretas que resuenen con sus necesidades y valores.
En resumen, los chicos y chicas de TikTok representan una generación que ha encontrado en esta plataforma un espacio para expresarse, conectarse y aprender. Su influencia en el ámbito político es cada vez mayor, y los candidatos que deseen conquistar su voto deben comprender sus intereses, preocupaciones y valores, y utilizar estrategias creativas para involucrarlos de manera significativa en el proceso electoral. TikTok se ha convertido en un canal de comunicación clave para llegar a los jóvenes, y aquellos que logren utilizarlo de manera efectiva tendrán una ventaja en las elecciones de 2023.
Fuente: Urgente24